martes, 19 de julio de 2011

AMAZONIA VULNERABLE

Articulo escrito y tomado de Frida Sánchez Ríos.

De solo mencionar la palabra Amazonia se nos viene a nuestra mente imágenes de riqueza natural, con grandes extensiones de bosques, biodiversidad de especies de fauna, ríos de agua dulce, así como escenarios de inigualable belleza paisajística; observable sólo por quienes admiramos y en mayor medida, por quienes vivimos en éste lugar tan majestuoso.

Nos comentan que antiguamente existía tanta riqueza de recursos naturales, como cochas repletas de peces, animales de caza, especies maderables y no maderables de importancia económica. Sin embargo, en las últimas décadas, la abundancia de recursos y manejo ancestral dado por las poblaciones rurales se ha visto amenazada por las más continúas intervenciones extractivistas del hombre, especialmente por aquellos que denominamos “foráneos”, tornándose preocupante y hasta dramático, siendo los más afectados las poblaciones nativas y ribereñas, quienes subsisten gracias a estos recursos naturales.

La Amazonia peruana comprende un área de 782.880,55 km²y alberga el 30% de la biodiversidad terrestre. Representa una de las áreas con mayor biodiversidad y endemismos del planeta; esto es debido a que existen factores como la variedad de ecorregiones y pisos ecológicos, que albergan especies únicas y que han permitido reconocer los diferentes records que nuestro país ha obtenido internacionalmente. Es necesario, mencionar que muchas de estas especies continúan siendo desconocidas para la ciencia; y que en la actualidad se encuentran amenazadas por actividades como la extracción maderable, la construcción de carreteras, los incendios, y deforestación para fines ganaderos y agrícolas.

Cabe mencionar, que debido a la deforestación cada año se pierden en el país aproximadamente 150 mil hectáreas de bosques, significando un comprometido daño al ambiente. Los bosques aportan importantes servicios ambientales al país, vinculados con el agua y con el suelo, y su pérdida representa más del 42% del total de emisiones de gases de efecto invernadero, los cuales contribuyen de manera directa al cambio climático. Según estudios nos indican que la deforestación y los incendios en la Amazonía son las principales fuentes de emisiones de CO2 en el Perú.

Este aumento de CO2, contribuye más al cambio climático, éste a su vez reduce la humedad de la selva haciéndola más susceptible a los incendios, que a su vez emiten más CO2 generando un catastrófico círculo vicioso.Nos encontramos ante dos acontecimientos destructivos, cuyos efectos se combinan, pudiendo llegar a convertir ésta impresionante zona de bosque primario, en praderas y desiertos inhabitables. La red fluvial de 100.000 kilómetros que conforman la cuenca amazónica depende de la existencia del área boscosa, porque el 50 % de las precipitaciones en esta región se producen a causa de éste sistema forestal. Un bosque con menor humedad es más vulnerable a los incendios.

Ahora nos preguntamos: ¿Qué pasó? ¿Por qué tanta crueldad con los bosques?, ¿En qué estamos fallando?, o acaso la gente es tan inconsciente y no se dan cuenta del grave daño que están ocasionando a nuestra Amazonía.

Estamos todavía a tiempo de tomar las medidas correctivas necesarias ante ésta problemática que hoy en día, está generando destrucción y temor en la humanidad; debemos unir esfuerzo, plantear y aplicar estrategias de gestión adecuada y oportuna, y actuar de manera rápida para así detener los efectos causados por las malas acciones del hombre y proteger la diversidad biológica, cultural y social de las poblaciones asentadas en nuestro territorio amazónico y el mundo.